ELECCIONES EN HIDALGO Y COAHUILA: LABORATORIO POLÍTICO RUMBO AL 2021

Las elecciones que se llevaron a cabo en Hidalgo y Coahuila, sirven como laboratorio político para el 2021, además se aprovechará para medir las estrategias de contención del Covid-19 rumbo a los comicios del próximo año.

El proceso electoral que se llevó a cabo en Hidalgo y Coahuila se realizó en un contexto inédito en la historia de México, ya que las medidas sanitarias se convirtieron en el actor principal para la organización de la jornada electoral. Cabe señalar que los comicios se realizarían en junio, sin embargo, se postergaron hasta octubre debido a la emergencia sanitaria que atraviesa el país.

Como medidas sanitarias recomendadas por la autoridad electoral para mitigar los contagios fueron: la sana distancia, el uso de cubrebocas, gel antibacterial, debates virtuales y eventos públicos en lugares abiertos. Estos mecanismos de prevención del Covid-19 serán también parte para la organización de las campañas electorales que se llevarán a cabo en 2021. 

Lo que pasó en Hidalgo y Coahuila es un preámbulo de las elecciones del 2021, las cuales serán las más grandes y complejas de la historia en México, ya que según informa el INE serán llamados a votar más de 95 millones de mexicanos, por más de 21 mil cargos de elección popular, entre ellos 500 diputados federales, 15 gubernaturas, 1063 diputados locales y 1926 ayuntamientos.

Las intenciones de los actores políticos interesados en competir en las próximas elecciones, se están viendo reflejadas en la maquinaria electoral que se mueve a pasos agigantados en la mayor parte del país. Por todos lados ya podemos apreciar espectaculares, folletos, publicidad y entrevistas en medios de comunicación de los posibles candidatos a participar.

Según el INE en las elecciones realizadas el pasado domingo, el PRI ganó los 16 distritos para renovar el Congreso en Coahuila y en el estado de Hidalgo que es gobernado por el priísta Omar Fayad, el partido tricolor obtuvo 32 municipios de 84, es decir que el partido que más cargos obtuvo en estos comicios fue el PRI, quedando Morena en segundo lugar en estos estados.

Lo acontecido en Hidalgo y Coahuila nos muestra a nivel local lo que probablemente ocurrirá a nivel nacional, las alianzas que se cocinan, la compra de votos, la inversión millonaria de los interesados en ocupar el poder y lo más importante es, que Morena no se tiene que confiar, ya que el dinosaurio no se ha extinto y quiere seguir mordiendo del presupuesto.

*Autor de la columna “Ajedrez Político”, Licenciado en Administración Pública y Ciencia Política, por la Universidad de Colima, analista independiente en temas sociopolíticos y colaborador en diferentes medios digitales.

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