No hubo sorpresa en la presentación de la iniciativa de reforma al sector eléctrico en México, ya que el presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió en sus libros y planteó en su plataforma de gobierno que esta era una de las metas del sexenio, dice el periodista Julio Ríos.
Ahora que finalmente la está presentando, resulta una propuesta polémica. Hay quien comenta que es regresiva e incluso que pretende expropiar o, peor aún, confiscar bienes de las empresas privadas que ya han estado invirtiendo en el sector eléctrico. También advierten el riesgo implícito en desaparecer los órganos reguladores, agrega el conductor de Rumbo MX, su canal en YouTube.
Por otro lado, quienes defienden esta propuesta son los políticos afines al grupo del presidente López Obrador: Morena y sus aliados. Por supuesto, comenzando por Andrés Manuel señalan que se va a recuperar la soberanía eléctrica en México. Y para valorar este discurso, Ríos platicó con una experta en el tema: la doctora Ana Luz Quintanilla, investigadora de la Universidad de Colima, quien entre otras responsabilidades fue durante dos años y medio directora del Instituto de Energías Renovables de la Universidad de Guadalajara.
En la emisión del 6 de octubre de 2021 (https://www.youtube.com/watch?v=h1puZWi4X5k&t=73s), la académica reconoce que:
“Efectivamente, cuando uno lee periódicos o escucha estaciones de radio, la información que se brinda al público es muy tendenciosa y poco clara. No todos los ciudadanos saben cómo se ha llevado la política energética en los últimos 30 años. Pero como yo me dedico a esto, puedo afirmar que no es ninguna novedad lo que está planteando el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Lo planteó desde la campaña y lo ha venido trabajando a lo largo de estos tres años”. El objetivo fundamental de esta reforma, ha dicho el presidente, es recuperar la soberanía eléctrica, la rectoría del Estado en esta materia y el control de las políticas ambientales.”
Y explica: ha sido muy criticada la forma en que los seres humanos con nuestras actividades hemos contribuido al calentamiento global, aunque no exclusivamente con la generación de energía eléctrica como generalmente se menciona, al grado de decir que el presidente López Obrador no quiere las energías renovables sino que pretende seguir quemando petróleo.
“La reforma está más enfocada a recuperar la soberanía energética nacional”, sentencia Quintanilla. Es decir, a establecer que debe ser el gobierno federal quien dicte la política energética y, obviamente, garantice a través de ella la seguridad energética.”
HERENCIA MALDITA
“En el gobierno de Carlos Salinas de Gortari se creó la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y otros órganos cuya función era promover la entrada de la industria privada eléctrica en México, lo cual supuso un verdadero hurto a los mexicanos.
“Como sabemos, la energía eólica que se produce tanto en Baja California por compañías franco-canadienses, como en el sureste principalmente por la empresa española Iberdrola, no es para abastecimiento de la demanda nacional sino para lo que, en la política energética, se llama autoabastecimiento de sus clientes en México.
“Es totalmente irregular que si el gobierno mexicano les puso las instalaciones y el cableado, no les cobre siquiera el peaje. Y, en horas pico, cuando no están funcionando las plantas eólicas, entran las de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) a subsidiar a las compañías privadas, principalmente a Iberdrola. Esto representa un gasto de miles de millones de pesos para el gobierno mexicano.
“Por eso, la reforma plantea desaparecer a las subsidiarias y dejar un solo órgano encargado de la generación, distribución y administración eléctrica en México: la CFE. Ésta se va a encargar de garantizar, producir y despachar el 54 por ciento de la energía que se genera en el país, pudiendo el sector privado participar hasta en un 46 por ciento. Sin embargo, desaparecerán los contratos de autoabastecimiento para privados, es decir, para los clientes de estas compañías franco-canadienses y españolas.
“La CFE se va a fortalecer con la desaparición de estos contratos de autoabastecimiento, porque las grandes cadenas comerciales y tiendas de autoservicio tendrán que comprar la energía a la Comisión Federal de Electricidad”. Y al precio real.
Para la académica de la Ucol, el esquema anterior era un hurto. Por ejemplo, la cadena de tiendas de conveniencia Oxxo ha venido pagando a un precio menor del que maneja la CFE, la electricidad que le venden las compañías privadas. Y esto ha sido posible porque, en momentos en que no hay continuidad en el recurso eólico, entra CFE a abastecer de manera subsidiada a las empresas franco-canadienses o a Iberdrola.
LITIO, EL NUEVO ORO:
“La reforma energética también está haciendo una nueva propuesta en temas de minería –expone Quintanilla–. En los tres gobiernos anteriores al actual, se concesionaron más de ocho mil plantas mineras que, realmente, no dejan ni el cuatro por ciento de sus ganancias en este país; minas que están poniendo en riesgo el recurso hídrico, porque México es el segundo país en Latinoamérica con mayor estrés hídrico después de Chile; y que, además, están contaminando los mantos acuíferos.
“Los mexicanos estamos corriendo un doble riesgo, primero al entregar nuestro recurso del agua para compañías mineras que no dejan gran ganancia en este país, y, además, al arriesgar la salud de los mexicanos con la contaminación que emiten”.
Si trabajaran con la normatividad de sus países, la afectación económica y ecológica disminuiría. “Pero la normatividad mexicana en términos de minería es bastante light. Si se mantiene el esquema vigente de contrato con los productores independientes privados, el daño a la nación puede llegar a ser hasta de 412 mil millones de pesos nada más por el por subsidio”.
“Con la reforma, el presidente está creando opciones para hacer que los mexicanos tengamos gasolina a bajo precio y tarifas bajas en la electricidad, para no caer en la situación de España donde, en días pasados, subió más de un 60 por ciento el precio de la electricidad ya que la generación y distribución está dominada por los privados y no por el Estado.
“En 1994 el presidente Carlos Salinas de Gortari creó la Comisión Reguladora de Energía, y puso como directora a la doctora Georgina Kessel para que promoviera las regasificadoras en México. Desde mi perspectiva como científica, este proyecto era totalmente fallido porque México no tenía siquiera reservas probadas ni estimación de gas en aquel entonces. Se pensaba que iban a traer el gas de Rusia, de Bolivia o de Australia. ¡Un absurdo total!
“Curiosamente, cuando entra Fox el proyecto se consolida, pero después, con Calderón, Georgina Kessel llega a ser secretaria de Energía. Aunque ya desde la CRE, como directora implementó todas estas nuevas medidas para abrir el sector al mercado privado extranjero.
“En este sentido, el presidente López Obrador no está en contra de que venga iniciativa privada a brindar servicios, pero no en las condiciones de este momento. Se van a respetar las concesiones que ya se dieron, mas no se van a dar más concesiones de la manera inequitativa que se estaban dando.
“Por la parte minera, es una noticia extraordinaria que en México se haya descubierto el mayor yacimiento de litio. Un mineral importantísimo en el mundo, ya que todos los aparatos electrónicos usan pilas de litio. Para los chinos y los indios en plena emergencia económica, el litio es fundamental.
“Con las reservas de litio, en términos de los precios actuales en el mercado, se podría pagar tres veces la deuda externa de México. Y eso es trascendental porque casi el 60 por ciento del producto interno bruto (PIB) del país se destina al pago de la deuda externa, que incluye al Fobaproa.”
Como recuerda Ana Luz Quintanilla, “en una operación absolutamente desleal al pueblo de México”, se rescataron tres bancos para que fueran adquiridos por extranjeros: Banamex (ahora filial del Citibank estadounidense) y los españoles BBV Bancomer y Santander. “Nosotros, nuestros hijos, nietos y bisnietos, tendremos que seguir pagando esta deuda externa” a menos que encontremos una fuente de ingresos para liquidarla.
CAMBIO DE RUMBO
En resumen: “los directivos de la CFE advirtieron a los legisladores que la paraestatal está sufriendo una sangría, porque los subsidios a privados en este momento son de más de 249 mil 600 millones de pesos, de los cuales 56 mil 175 millones corresponden únicamente a Iberdrola por el parque eólico de La Ventosa en Oaxaca”.
El subsecretario de Gobernación, Adán Augusto López, ya adelantó que van a desaparecer la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y obviamente la Comisión Reguladora de Energía, “dos instancias que en la época de Salinas se crearon para acotar las funciones de la CFE y, de esta manera, permitir que entrara la iniciativa privada a México”.
“Fue una deslealtad con el pueblo de México. Solamente en nuestro país sucede que Georgina Kessel, primera directora de la CRE y, después, con Calderón secretaria de Energía, pase junto con Felipe Calderón a formar parte del consejo de Iberdrola. Ahí hay un cochupo.
“La reforma busca que correspondan al Estado tanto el manejo y la explotación, como la distribución de la energía. La CFE establecerá los costos de la energía en México y también las cuestiones relativas a la exploración de minerales considerados como estratégicos.
“En este momento hay ocho concesiones que se habían otorgado a igual número de empresas para la explotación del litio, pero, de acuerdo con la Comisión Federal de Electricidad y la Secretaría de Energía, hay un informe de que no todas esas sociedades reúnen las características para lograr acreditar una concesión. Al parecer, solamente una de ellas va a entrar como privada.
“La reforma que se envió a la Cámara de Diputados contempla la desaparición de la Comisión Nacional de Hidrocarburos y de la Comisión Reguladora de Energía, en relación con la electricidad. Y, respecto al gas, que el transporte, almacenamiento, distribución, compresión, licuefacción y regasificación sean manejados por el Estado.
“En términos de minería, lo que agregó al final el titular de la Segob es que permanecerán las concesiones otorgadas a particulares para la explotación de oro, plata y cobre, porque ya son concesiones dadas y, por cancelarlas, tendríamos que pagar multas de miles de millones de pesos. Sin embargo, ninguno de estos permisos se va a poder utilizar en el caso particular del litio”, concluye Ana Luz Quintanilla.