+ Griselda Martínez lamenta imposiciones por parte de personal del gobierno estatal en el caso.
En la ceremonia cívica celebrada este lunes en la Presidencia municipal -bajo la organización de la Dirección de Servicios Generales-, se contó con la entusiasta participación de la escolta de alumnas de la Primaria 5 de Febrero, la Banda de Guerra de la Dirección de Seguridad Pública, y personal del H. Ayuntamiento de Manzanillo.
Luego de rendir honores a nuestros símbolos patrios y recordar las fechas históricas importantes, la Presidenta Municipal, Griselda Martínez, aprovechó la ocasión para dirigir un atento mensaje a la ciudadanía.
Explicó que para aclarar cualquier mal entendido, a continuación señalaría una serie de situaciones generadas la semana pasada en el Mercado 5 de Mayo.
La alcaldesa detalló: “Personal del gobierno estatal nos llamó por teléfono para que alguien acudiera en ese momento a recibir el elevador reparado, sin embargo, al llegar personal del municipio comprobó que el elevador seguía sin funcionar y las personas explicaron que se dejaría funcionando. Pidieron por adelantado, firmas de recibido, así como el compromiso -de nosotros- de pagar el mantenimiento a quienes ellos dispusieron, la cantidad que ellos acordaron, con quienes dispusieron”. Griselda Martínez dijo que las cosas no se hacen así y cuestionó: ¿Quién les dijo, de dónde, por qué?
La alcaldesa precisó que en su gobierno se manejan los recursos públicos con honradez y transparencia. “Nosotros no podemos como una imposición de funcionarios de Gobierno del Estado pagarle a quien ellos nos digan, la cantidad que ellos nos quieren de mantenimiento -de algo que nadie de nosotros pidió, con excepción de algunas personas que trabajan en el mercado. Y además están usando mal el elevador, suben sus rejas y el exceso de peso descompone el elevador”.
Finalmente, la presidenta informó que buscará reunirse con los empleados del gobierno estatal para explicarles cuáles son los trámites que se tienen qué hacer en este proceso entrega-recepción del elevador, con ánimo de hacer las cosas bien y con el único objetivo de privilegiar el interés de los manzanillenses.