El plan de recuperación económica que se aplicará por parte del Gobierno de México no se ajusta al modelo neoliberal o neoporfirista, de rescatar a los de arriba y socializar las pérdidas, “ya rompimos el molde”, anunció en su informe trimestral al pueblo de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Después de expresar su “reconocimiento y solidaridad a todos los mexicanos que, con mucho sacrificio, se han sumado a las medidas de prevención recomendadas por la Secretaría de Salud. En particular, expreso mis condolencias a las familias de quienes han enfermado o han perdido sus seres queridos en esta contingencia”, anticipó que, “a pesar de los pesares saldremos adelante, porque son más nuestras fortalezas que las debilidades o flaquezas”.
AMLO expuso que “a pesar de las adversidades, no se detendrá la transformación de México. Reitero, son más nuestras fortalezas que las debilidades y son mucho más los ciudadanos que buscan el cambio verdadero que quienes apuestan al retroceso. Esta crisis es pasajera, transitoria. Pronto regresará la normalidad, venceremos al coronavirus, reactivaremos la economía y México seguirá de pie, mostrando al mundo su gloria y su grandeza”, el presidente expuso que “antes el pueblo se apretaba el cinturón en las crisis, ahora es el gobierno el que toma medidas de austeridad”.
Aseguró que lo que su Gobierno está haciendo es “por lo que votaron millones de mexicanos”, agregando que “hay una lección que hemos aprendido bien y que no olvidamos: desde el Porfiriato quedó demostrado que un modelo económico que solo beneficia a minorías, no produce bienestar general sino, al contrario, engendra miseria pública y violencia”.
Por eso, su plan de recuperación económica “no se ajusta al modelo neoliberal o neoporfirista. Ya rompimos el molde que se usaba para aplicar las llamadas medidas contracíclicas que solo profundizaban más la desigualdad y propiciaban la corrupción en beneficio de unos cuantos. La fórmula que estamos aplicando para remontar la crisis transitoria, repito, es la suma de tres elementos básicos: mayor inversión pública para el desarrollo económico y social; empleo pleno, y honestidad y austeridad republicana”.
Recordó que “frente a las crisis recurrentes, los gobernantes decían que ni modo y que no había de otra; para ellos, lo mejor era lo que llamaban realismo económico: contratar más créditos, rescatar a grandes empresas y bancos, convertir deudas privadas de unos pocos en deuda pública; establecer privilegios fiscales, aumentar precios de combustibles y de los servicios públicos, disminuir salarios, despedir a trabajadores, eliminar o reducir la seguridad social. Ahora ya no es la misma receta; ahora, primero es el bienestar del pueblo y después lo mismo, el bienestar del pueblo, y nunca jamás los privilegios, la corrupción, el saqueo y la impunidad. Somos optimistas”.
¿CÓMO LO FINANCIARÁ?
El presidente expuso que para financiar este plan sin aumentar impuestos ni decretar gasolinazos, “se recurrirá a utilizar los ahorros del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios y los recursos que se mantenían guardados en fideicomisos. También nos apoyaremos en la banca de desarrollo, pero, sobre todo, se seguirá con la misma política de liberar recursos porque continuará, incluso con mayor rigor, el Plan de Austeridad Republicana”.
Agregó que, a diferencia de otras épocas, “cuando se le pedía al pueblo fajarse el cinturón, ahora es el gobierno el que se lo está apretando el cinturón, terminando de borrar la corrupción, acabando con lujos y ostentaciones para reducir el costo del gobierno a la sociedad y seguir regenerando la vida pública”.
En esta crisis transitoria, dijo “a cada quien le toca hacer su parte”, por lo que “se bajarán los sueldos de altos funcionarios públicos y se eliminarán los aguinaldos desde el cargo de subdirectores hasta el del Presidente de la República. Se reducirán el gasto en publicidad del gobierno, la partida de viáticos, los gastos de operación y se ahorrará más en compras a proveedores y en los costos de las obras públicas que se contratan con empresas constructoras o de servicios”.
“También dispondremos de recursos porque se intensificará la enajenación de bienes mal habidos de la delincuencia común y a la delincuencia de cuello blanco; bienes que serán liquidados mediante subastas o rifas organizadas por el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado”, y aclaró “que no habrá despido de trabajadores al servicio del Estado en ningún nivel, pero se demandará más eficiencia, más entrega, más espíritu de servicio, mayor austeridad y honestidad total”.
PRÓXIMA SEMANA, PROGRAMA DE INVERSIÓN POR $339 MIL MDP
AMLO agradeció que su gobierno ha contado “con el apoyo y la colaboración del sector privado nacional. La semana próxima daremos a conocer un programa de inversión pública, privada y social para el sector energético por un monto aproximado de 339 mil millones de pesos. Reconozco a los banqueros de México que decidieron dar una prórroga de seis meses en el pago de créditos e intereses a sus clientes de las pequeñas empresas y el crédito a las familias”.
También, agradeció a todos los empresarios que han “acatado voluntariamente las indicaciones por la emergencia sanitaria, de parar sus actividades económicas y comerciales no esenciales, manteniendo el empleo, los sueldos y las prestaciones a sus trabajadores”.
INVERSIONES EN SALUD PARA CONTENER CORONAVIRUS
En cuanto a la pandemia, el presidente AMLO expuso que “desde antes de la aparición del coronavirus, ya habíamos recorrido 80 hospitales del IMSS Bienestar en zonas marginadas de 19 estados de la república y habíamos tomado la decisión de superar el estado ruinoso en el que nos dejaron el sistema de salud pública. En este tiempo hemos terminado de construir 72 centros de salud y hospitales que estaban inconclusos. Se creó el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) para garantizar la atención médica y medicamentos gratuitos a la población sin seguridad social”.
Agregó que hizo “el compromiso de otorgar en este sexenio la base laboral a más de 80 mil trabajadores de la salud que laboran desde hace tiempo como eventuales. Todo ello respaldado con la aprobación presupuestal de 40 mil millones de pesos adicionales para el sector salud”.
Expuso que, al día de hoy se cuenta con 6 mil 425 camas de terapia intensiva con sus respectivos ventiladores y con el personal de enfermería y médicos especializados; en los planes de la Secretaría de Marina y DN-III del Ejército, informó que ambas instituciones recibieron 5 mil millones de pesos y pronto se tendrán como respaldo 1 mil 399 camas, equipos y personal médico especializado para atender en terapia intensiva a enfermos de COVID-19.
Sobre las acciones de salud que ha tomado para enfrentar la epidemia, destacó las siguientes: hace 3 meses, antes que otros gobiernos, empezó a informar a la población y a emitir recomendaciones preventivas con el propósito de evitar saturación de hospitales y mayores pérdidas de vidas humanas; desde el primer momento tomó la decisión de dejar la conducción de toda la estrategia sanitaria a los médicos especialistas y científicos que “son eminencias con vocación social”; ayudó mucho la solidaridad de nuestro pueblo y la fraternidad que caracteriza a nuestras familias, “que como lo he señalado en diversas ocasiones, es la principal institución de seguridad social del país”.
CONTINÚA EL PLAN DE BIENESTAR
El presidente expuso que mantiene “inalterables y profundizaremos las acciones destinadas a la población más pobre y vulnerable del país. Por eso decidimos adelantar cuatro meses el pago de la pensión para 8 millones de adultos mayores, a través de bancos y la entrega personal de 42 mil millones de pesos”.
Detalló que lo mismo hizo con las pensiones para niñas y niños pobres con discapacidad; “estamos entregando 10 millones 500 mil becas a estudiantes de todos los niveles escolares y en las universidades Benito Juárez donde estudian 15 mil 151 alumnos y laboran 870 docentes. Por otra parte, hemos entregado a pequeños negocios familiares 356 mil créditos del programa Tandas para el bienestar y, este año, se agregarán 450 mil más con una inversión total de 3 mil 400 millones de pesos”.
Actualmente, expuso, 230 mil sembradores cuentan con empleo permanente y están ocupados en cultivar sus parcelas; 740 mil jóvenes trabajan como aprendices y reciben un salario mínimo. “Desde el inicio del gobierno hemos entregado apoyos para 47 mil 500 pescadores por 342 millones de pesos; se estableció el precio de garantía para maíz, arroz, trigo, frijol y leche en beneficio de 107 mil productores; el programa de producción para el bienestar –antes Procampo– se extendió a comunidades indígenas y a productores de caña y café, con una inversión de 11 mil millones de pesos; reciben este apoyo dos millones 145 mil comuneros, ejidatarios y pequeños propietarios. Este año, los productores pobres de Puebla, Tlaxcala, Morelos y el Estado de México se sumarán a los de Guerrero como beneficiarios de fertilizantes gratuitos”.
Hasta el día de hoy, el presupuesto para el mantenimiento de 23 mil escuelas, entregado de manera directa a las sociedades de padres y madres de familia, asciende a 4 mil millones de pesos; “continuamos construyendo caminos de concreto con la participación de las comunidades de Oaxaca, llevamos 25 terminados y se está trabajando en 84 más”.
Expuso que se avanza en la construcción de caminos rurales y en el mantenimiento, construcción y modernización de carreteras en las 32 entidades federativas del país, con una inversión global de 28 mil millones de pesos. “Se continúa la construcción del Tren Toluca-Ciudad de México y ya se terminó la línea 3 de Zapopan a Guadalajara. No se ha detenido el programa de construcción de presas y canales de riego; sigue operando el programa de reconstrucción en pueblos afectados por los sismos de 2017 y hemos mejorado los espacios urbanos en 324 colonias de 14 municipios del país. El Infonavit ha otorgado 619 mil créditos, ha restructurado 186 mil y ha quitado deudas a 53 mil trabajadores que habían pagado el 90 por ciento de sus créditos a los cuales ya se les están entregando sus escrituras”.
El programa de rehabilitación o construcción de vivienda ha beneficiado a 17 mil 800 familias de zonas marginadas. El programa Internet para Todos ya conectó a 22 mil comunidades y este año quedarán comunicadas un total de 75 mil localidades, finalizando que “en 2022 cumpliremos la meta de cubrir todo el territorio nacional. De igual forma, ya iniciamos la construcción de 2 mil 700 sucursales del Banco de Bienestar, para acercar este servicio a la gente, entregar tarjetas y dejar de manejar dinero en efectivo para los programas sociales”.