Después de la disputa del fin de semana en torno a las asambleas distritales de MORENA en Colima, pospusimos comentar sobre lo que nos dejó la semana de comparecencias que tuvieron los integrantes del gabinete peraltista ante el Congreso del Estado, como parte del Cuarto Informe de Gobierno de José Ignacio Peralta.
A falta de resultados en materias sensibles para la población, debemos destacar la franqueza a todos los tintes partidistas de la actual legislatura de no dar cabida a excusas que justificaran los grandes fracasos de la administración estatal: no vivimos felices ni seguros, el estado está más endeudado de lo que sabíamos, y la mala administración ha dejado como gran legado el estancamiento en los servicios de salud estatales, embrollos que el único que se dignó en reconocerlos fue el subconsciente del Secretario de Administración, Kristian Meiners, quien se pasó de sincero al augurar “la derrota electoral” del Partido Revolucionario Institucional en los comicios estatales de 2021.
Infelices e inseguros
El Secretario General de Gobierno, Arnoldo Ochoa, y el Secretario de Seguridad Pública, Enrique Alberto Sanmiguel, se llevaron los reclamos más sentidos, porque de ese tamaño es el descontento social con respecto a la que fue la principal promesa de campaña de Nacho Peralta. A cuatro años de gobierno, el lodazal de la inseguridad se ha convertido en pantano, evidenciado por varias de las fracciones parlamentarias en el Congreso.
Fernando Antero (PAN) cuestionó a la Secretaría General de Gobierno de qué manera se han apoyado a los ayuntamientos para el fortalecimiento de la seguridad en sus municipios, dando en uno de los puntos clave del problema: la falta de coordinación entre la instancia estatal y las municipales que se dio de sobremanera en la primera mitad de este sexenio. El diputado Paco Rodríguez cuestionó al titular de Seguridad y le enfatizó que el gobierno estatal se ha vuelto incapaz de aminorar la problemática de la inseguridad y la violencia; como ejemplo, expuso que la percepción de los colimenses respecto al tema de la inseguridad ha crecido, ya que en 2016 el 65.8 por ciento de la población consideró la inseguridad como el problema más importante y delicado, indicador que ha aumentado con el paso del tiempo. “¿Quién puede vivir feliz y seguro así?”, lanzó Paco Rodríguez como dardo final.
El morenista Vladimir Parra cuestionó a Sanmiguel sobre la falta de efectividad en la promesa de campaña del gobernador, agregando que no es posible que el 50 por ciento de los recursos destinados a nómina sean para el personal administrativo y de oficina, agregando el desazón de los ocho meses de retraso para entrega de 22 patrullas con dinero que fue etiquetado desde el Congreso local.
Al menos Noriega se llevó un libro
Carlos Noriega, Secretario de Planeación y Finanzas, tuvo que aceptar un incremento en la deuda estatal por más de 129 millones de pesos con respecto al Tercer Informe de Gobierno. La pura afirmación de este incremento en la deuda desmorona una de las grandes líneas discursivas pro-peraltistas que se manejan desde algunas trincheras: que el gobierno de Nacho administra bien los recursos.
Nada más visto el resultado financiero más evidente, Vladimir Parra tuvo a bien regalarle un ejemplar del libro “Breve historia del neoliberalismo”, deseando al secretario que “le ayude a reflexionar sobre la necesidad de un cambio en las políticas financieras en la entidad. Pues el neoliberalismo en México y Latinoamérica ha sido un fracaso”.
La legisladora de MORENA, Jazmín García Ramírez, expuso a la contralora del Estado, Águeda Catalina Solano, que al hacer una revisión del Portal de Transparencia no encontró las actualizaciones de las declaraciones patrimoniales de algunos titulares de secretarías y preguntó el por qué no se ha instado a los Secretarios para que presenten sus declaraciones 3 de 3. Esta exhibición de opacidad en la administración estatal se suma a varios temas que se han colado al pleno de la presente Legislatura; recordemos nada más los vuelos del gobernador.
Leticia Delgado, hermana del diputado federal morenista Mario Delgado, se estrenó como parte del equipo peraltista en la comparecencia de este Cuarto Informe. Terminó reconociendo que recibió la SS y BS con heridas y ni siquiera una gasa para curarse; según sus datos, el desabasto de medicinas oscila entre un 15 y 20 por ciento, siendo éstas las cifras oficiales.
Y Meiners emuló a Mhoni Vidente…
Kristian Meiners, antes de su cantada monumental, evidenció una fractura enorme (casi grieta) con el Secretario de Finanzas, a quien culpó de prácticamente todos los atrasos que tiene su dependencia en cuestión de pagos. El más evidente y más sentido en la actualidad es el adeudo reconocido de casi $200 millones de pesos al Instituto de Pensiones del Estado de Colima. Una vez más, se trazó la incapacidad administrativa del gobierno peraltista.
Sin embargo, la joya de la semana de las comparecencias salió también de boca del yerno del ex gobernador Elías Zamora Verduzco: “probablemente la entidad sea gobernada por otro partido político en años próximos”.
Al pasarse de sincero, el terror de los trabajadores de confianza y sindicalizados del gobierno estatal, recibió el reclamo de la legisladora priista, Malú Berver Corona: “Lo entiendo porque usted no milita en mi partido, el PRI, y no tiene la sensibilidad política y social que deberíamos exigirle y debemos exigirle”.
Pues sí, tiene razón diputada. Aunque Meiners también.