Las bases legitimas del Movimiento de Regeneración Nacional, MORENA, partido-movimiento o fuerza política con la que llevamos al triunfo al ahora presidente de la República y gran líder de la transformación revolucionaria del país; deben estar muy alertas tras la resolución emitida por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, para evitar que los oportunistas y reaccionarios, que nadan de patito en esta transición, lleguen a las plácidas aguas mansas del gran proyecto de la Cuarta T y se monten a la cabeza, porque la sobrevivencia de un régimen a otro es su bandera política en esta coyuntura.
Los que llevamos una lucha ya larga en la línea de la transformación del país contra la burguesía y por los derechos de los obreros, los campesinos, comerciantes, profesionistas, maestros y maestras, intelectuales; por la democratización de la vida pública nacional y la justicia social; reconocemos la importancia de que todo proceso revolucionario cuente con una estructura organizativa que sostenga el triunfo, y asegure el cumplimiento de los ideales por los que se luchó hasta dicho logro.
Las condiciones objetivas y subjetivas que hicieron posible los tres triunfos electorales de Andrés Manuel López Obrador, tuvieron un natural arribazón a su causa de muchos ciudadanos de otros orígenes partidarios que vieron en su tiempo la oportunidad, el decreto natural de que un día el destacado político tabasqueño sería presidente. Y llegaron a posiciones hoy estratégicas, ciertamente, cuando se saborea el triunfo. Pero claro es que fueron llegando sin que los llamaran, porque es cierto también que el líder político nacional, jamás transó para sumar medios para su fin: fue el pueblo el que lo llevó a la presidencia, obviamente, y no los grupos de poder que llevaron a los hoy ratas confesos expresidentes.
Pero esa coyuntura, es cierto, influyó en los adentros de MORENA, que padeció- y padece- ciertas concesiones a los oportunistas, dejando de lado a muchos legítimos luchadores y activistas sociales que bien podrían haber sido lo dirigentes de MORENA, los candidatos a cargos públicos y representantes populares y titulares de gobiernos; el caso de Colima es ejemplo negro de esto, pues se dejó de lado a los fundadores y reconocidos luchadores, porque a nivel central las facciones de intereses, regenteados allá por el yuppi César Yáñez, y aquí por sus hermanos y hermanas con la ayuda de colaboracionistas obsequiosos que pusieron en mal a la legitima militancia local; e impusieron las desangeladas -y ajenas de toda trayectoria de lucha- personalidades como candidatos, cuyo fracaso es evidente.
De tal manera que aunque el triunfo fue contundente, de que el presidente goza de mas del 70 por ciento de aprobación; MORENA no ha podido consolidarse para hacer frente a la muy cerrada fila de intereses de la corrupción que por todos los medios tratan día y noche de socavar la 4 T, afortunadamente sin ningún éxito ahora, ni se prevé tengan en el futuro.
Pero hay la percepción de que el enemigo está en casa, francamente; o cuando menos que esa división, sobretodo en la parte cercana al yañeznato, en Colima ésta apoya más las causas prianistas, que las de la 4 T. Y como ejemplo está que tanto la caudilla de la colaboración con el grupo político priista local, la diputada Claudia Yañez; el senador Joel Padilla y el diputado federal Mario Delgado, cabezas visibles del oportunismo dentro de Morena, no se han pronunciado lo suficiente contra el endeudamiento ni el fracaso absoluto de la gobernabilidad del régimen de Nacho, como si les agradara éste.
Respecto a la resolución del STEPJF, efectivamente, como lo recomienda Pedro Miguel, hay que actuar con la cabeza fría. Es claro que pesa mucho en la decisión por mayoría de los magistrados de este órgano, el aspecto político, pues ese, como el propio INE, vienen del antiguo régimen de la corrupción, se mueven en esa inercia, en el cluster donde todo el engranaje de la corrupción pública se movía al mismo ritmo. Y era de esperarse esa resolución, conociendo el historial del organismo judicial.
¿Qué debe hacerse frente a esta realidad, donde argumentando la emergencia de salud, el organismo se mete al corazón de MORENA para ordenar que cambie su directiva nacional por encuesta abierta vía telefónica, para que voten propios y simpatizantes?Morena y su auténtica militancia tiene que actuar con frialdad, con serenidad.
Finalmente, todo el proyecto revolucionario de la 4 T enfrenta ataques por todos lados de los antiguos exponentes del régimen de la corrupción y la mentira públicas, de modo que esta resolución de TEPJF, debe ser igualmente atajada, ¿cómo? Ponderando de inmediato al interior de MORENA, un trabajo que se enfoque a la elección de la directiva nacional por la vía de candidatas o candidatos de unidad, para cerrar el paso a la reacción o a los propios oportunistas hoy ubicados al interior, como el caso de Colima, para que se apropien de la dirigencia nacional del movimiento.
PUNTO Y RAYA
Ruedin, rodó al privilegio de la traición pública.Ocurre que el diputado local Rogelio Rueda puso fin a su vida política pública, para pasar a recoger las mieles de su última cosecha, a donde fue premiado por su traición a los valores, precisamente, de la responsabilidad púbica.
Metió licencia al cargo de representante popular, para pasar a desempeñar el Fiat de Notario conque el gobierno de Nacho Peralta lo premió por su incondicional entrega o servicios a la corrupción. Porque obtuvo la Notaría no por haber estado en la lista de aspirantes, sino que fue evidente, de que la concreta, porque facilitó la operación para el endeudamiento de las finanzas del gobierno del Estado, por 750 millones de pesos.
Es el camino que han seguido otros incondicionales del viejo régimen de la corrupción, que son premiados con la placa de Notario por sus -incontables inenarrables- servicios al sistema. Y es que Notario no significa en Colima una categoría de decencia, de intachable moralidad. Eso todo Colima lo sabe. Es la entrega sectaria, de partido, de esas fichas, un recurso de un sistema político corrupto, para premiar a sus cómplices. Y es algo que debiera anularse, por ser un resabio que ya no tendría existencia en un nuevo Estado democrático como el que representa la 4 T.
Además, supongo que debe haber una investigación por el asesinato de 7 policías, donde los críticos del ahora diputado con licencia, dicen que están involucrados dos familiares muy cercanos. Y también debiera exentarse de ejercer ese notariado, por ese hecho, hasta que no se aclare del todo.
¡Hasta la próxima!