NI CORRUPTOS NI OFICIALISTAS

La conversación que Isabel Arvide sostuvo con el presidente López Obrador en La Mañanera del 9 de enero de 2020, refleja claramente el debate que se ha desatado entre los periodistas que trabajan en empresas mediáticas y los comunicadores emergentes que se expresan a través de las redes sociales.

De acuerdo a la versión estenográfica de la propia Presidencia de la República (https://www.gob.mx/presidencia/articulos/version-estenografica-de-la-conferencia-de-prensa-matutina-jueves-9-de-enero-2020?idiom=es), tras saludar, presentarse y prometer ser breve, Isabel Arvide planteó dos preguntas:

La primera, en torno a lo dicho por Andrés Manuel López Obrador respecto a que, antes, en el país “estaban gobernando los criminales, que ellos eran quienes mandaban”. Pese a esos antecedentes, estableció la periodista, los actuales mandos en Marina y el Ejército “son absolutamente incorruptibles, no hay un elemento en contra de ellos”. Sin embargo, ¿la “estructura criminal al servicio del crimen organizado en las zonas militares, en las regiones militares” ya fue desmantelada?, preguntó Arvide, incisiva.

Tras aclarar que investigó a fondo al general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional, antes de nombrarlo, el presidente López Obrador declaró que el Ejército “es una de las instituciones menos penetrada por la corrupción; es muy raro saber de generales que formen parte de la oligarquía en México o que sean potentados. En otros países es distinto”.

Y ante la insistencia de Arvide en que no se han presentado denuncias en contra de los militares que “sí están metidos”, el mandatario enfatizó: “Si ya no hay ese ambiente que había, vamos a poder limpiar”.

De las fuerzas armadas AMLO pasó a los propios militantes de Morena, a quienes advirtió que esa subcultura de llegar a los cargos de gobierno o representación popular para aprovecharse, se acabó. Estamos ya en otra época, y eso vale también para los medios de comunicación: la mayoría ya no pueden ser “señalados como periodistas oficialistas, por decirlo de alguna manera”.

CERTIFICADO DE VIRGINIDAD

La segunda pregunta de Isabel Arvide fue, entonces, sobre la publicidad oficial:

“Hay una nueva reducción en el monto que se va a gastar este año, hay también 80 millones de mexicanos que utilizan internet”. De ésos, 70 por ciento se informa por internet. “Sin embargo, quien recibe la publicidad oficial es un semanario que se llama Proceso, que usted dijo que no se lee, y cada semana vemos un gran número, a veces 11, a veces 13, a veces 16, pero vienen páginas y páginas de publicidad. Y quienes tenemos un portal, estamos en redes sociales, estamos aquí desde la madrugada, no recibimos un centavo de publicidad.

“Este año, señor, ¿va a haber alguna manera en que esto cambie?, ¿en que lo que usted ha llamado benditas redes sociales tengan mayor importancia que un semanario, que además lo golpea? Todo el tiempo, está buscando de qué manera estar en contra y estar fustigando innecesariamente. Porque si no, podríamos tener un nuevo paradigma de: ‘Solamente te pago si me pegas’”.

Y mientras López Obrador instruía a su vocero, Jesús Ramírez, a ver el asunto, Arvide remató su exposición con una frase para el mármol: “Porque, además, hasta certificado de virginidad [piden] para aspirar a tener publicidad”.

Fue entonces que el presidente López Obrador encargó a Jesús Ramírez “nos informe la semana que viene cómo es la política de la distribución de los recursos que maneja el gobierno para la publicidad, cuáles son los criterios y que se transparente”.

UN ASUNTO DE COBERTURA

Se trata, dijo el jefe de Estado, que el recurso “alcance, ahora es menos, poquito, porque es bendito. Si se distribuye bien, con justicia, va a alcanzar. Porque tenemos también la obligación de apoyar a los medios de comunicación, es un derecho el derecho a la información”.

“Y se tiene que fomentar sin condiciones, no es darle la publicidad para silenciar a los medios. No, sino que se pueda llevar a cabo el ejercicio del periodismo y lograr la información a la gente”.

En efecto, coincidió López Obrador, “ya ahora las redes sociales tienen bastante presencia e influencia en todo lo que se relaciona con la comunicación”. Las nuevas generaciones, por lo general, se informan de todo por las redes sociales.

Sin embargo, “no hay que descartar la importancia que tienen la televisión, sobre todo la radio, aún tienen muchos oyentes en el caso de la radio, muchos radioescuchas, y la televisión abierta lo mismo”.

Es también un asunto de cobertura. “¿Cómo llegan las redes sociales a los pueblos más apartados si no hay internet y sí hay televisión abierta o por cable? Yo, que voy a los pueblos, ahí veo los discos, unos azules, otros rojos, bueno, en los pueblos y también en las colonias de las grandes ciudades. Así se entera la gente, se comunica la gente, tienen que pagar por el servicio”, señaló refiriéndose probablemente al servicio de televisión satelital y a los colores de Dish y Sky.

“Hay que procurar nosotros mantener la competencia para que el servicio cueste menos, el servicio a tener acceso a la televisión, por ejemplo”. Y reiteró su promesa de que el vocero presidencial informe, incluso, de los montos pagados por publicidad oficial.

“NO SUGERÍ, PREGUNTÉ”

La franqueza que usó Isabel Arvide al comparar la situación actual de la prensa con la censura que los periodistas sufrieron antes, no gustó a los colegas que estaban en la mañanera ni a quienes la escucharon a través de los medios. En abril de 2019, la periodista ya había defendido el derecho de López Obrador a exigir a Reforma que revelara la fuente de una información polémica.

Lucy Sanabria, en Sopitas.com, registró en una nota del 9 de enero (https://www.sopitas.com/noticias/periodista-isabel-arvide-publicidad-medios-tradicionales-digitales-amlo/) las reacciones en Twitter a las palabras de Arvide:

Alfredo Lecona (@AlfredoLecona) escribió: “A veces se pide chayo en plena mañanera. Hace un momento, @isabelarvide reclamó a AMLO la publicidad que se da a @revistaproceso que se la pasa ‘atacándolo y fustigándolo innecesariamente’. Dice que mejor le dé a los que madrugan para la mañanera y a las benditas redes”.

Héctor de Mauleón (@hdmauleon) retuiteó el mensaje de Lecona, comentando lo siguiente: “Fiel a sí misma, la señora @isabelarvide hace ahora en público lo que aprendió hacer en secreto desde el sexenio de Echeverría”.

Y, finalmente, Carlos Quiñones (@sabio28) publicó:

“@isabelarvide usa #lamañanera de #AMLO para sugerir que la publicidad que se da a Proceso, que se la pasa ‘atacándolo y fustigándolo’, se la deberían de dar a los que están ahí madrugando para las conferencias o a los de #RedesSociales. #NoEsBroma #4T”.

A todo eso, Isabel Arvide Limón (@isabelarvide) respondió: “No sugerí. Pregunté si el nuevo paradigma en el otorgamiento de publicidad oficial es: ‘pago a quien me pega’ y dije que debía darse ésta a medios digitales porque ahí se informa la gente, no en tradicionales. Le recordé que dijo que él ya no leía @revistaproceso”.

Mi correo electrónico: carvajalberber@gmail.com.

Comentarios

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *