Como cada año, muchas y variadas fueron las actividades relacionadas con Periodismo en el marco de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara que se desarrolló del 24 de noviembre al 2 de diciembre de 2018.
Hacia el final de la FIL, el periodista cultural, escritor de cuentos y novelas, promotor de la lectura, publicista, guionista y productor de televisión Benito Taibo, fue reconocido en el Homenaje Nacional de Periodismo Cultural ‘Fernando Benítez’.
“Escogí el oficio más bello del mundo, y lo heredé como se heredan los oficios”, dijo al recordar a su padre, Paco Ignacio Taibo I, quien obtuvo este mismo reconocimiento antes de morir:
“Mi padre creía firmemente en la educación sentimental”. Y Benito Taibo le debe a él, agregó, el oficio más bello del mundo y el compromiso de ser, por lo menos, la mitad del buen hombre de lo que fue.
Con amor por la literatura, la escritura y el periodismo, Benito –sí, hermano de PIT II, quien después de la aprobación de una iniciativa denominada Ley Taibo en el Senado ya podrá ser director general del Fondo de Cultura Económica– ve la FIL de Guadalajara como una isla de palabras en un mar de barbarie.
Benito Taibo se dijo identificado como un periodista “de esos que hicimos periodismo desde el camión. Jugándonos el pellejo todos los días, convencido de lo que estábamos haciendo”.
En memoria de García Lorca, recordó sus palabras y expresó: “Un escritor escribe para que lo quieran”. Para luego mostrar orgulloso su pin de Benito Bodoque –el personaje de Don Gato y su pandilla– en memoria de su padre, y recordar al público que, ante todo, hay que seguirse riendo de uno mismo.
FOROS Y ENCUENTROS
Días antes, el cartonista Manuel Falcón, decano del grupo de moneros tapatíos al que pertenecen Trino y Jis entre otros que pasaron por la revista Galimatías, recibió La Catrina, escultura de bronce que reproduce un dibujo de Sergio Aragonés (libre versión de la célebre Catrina creada originalmente por José Guadalupe Posada), en el Encuentro Internacional de Caricatura e Historieta.
A lo largo de los 11 días que dura la feria, se desarrollaron foros como el dedicado a analizar ‘La vigencia del pensamiento político de Carlos Fuentes, a 90 años de su nacimiento’ o la memoria política de José Saramago, ‘El viaje de la conciencia’.
Se dio el diálogo ‘Los 68, cuando cambió el mundo’. Y un encuentro entre escritores, periodistas y actores al que convocó el periódico El País: ‘México ante sus fantasmas. Los desafíos del país, una mirada desde fuera de la política’.
Hubo también un coloquio con el ganador del Premio Gabriel García Márquez a la excelencia periodística 2018, Ignacio Escolar, titulado ‘Periodismo a pesar de todo’. Otro conversatorio sobre ‘#Fake News. ¿Una nueva forma de censura? Trolls y bots al ataque’. Y un Encuentro de Crónica, entre muchas otras actividades relacionadas.
PERIODISMO CON POESÍA
De estos eventos en la FIL de Guadalajara, la escritora argentina Leila Guerriero participó en el Encuentro de Crónica, en el foro ‘Periodismo a pesar de todo’ y en el Encuentro Internacional de Periodistas donde impartió la conferencia magistral ‘Periodismo narrativo: cómo y para qué’.
Ana León, quien la entrevistó para Noticias 22, el informativo cultural de la televisora pública, unos días antes de su intervención en la FIL, recordó que Guerriero ha hablado del periodismo como un oficio en el que se aprende a mirar y, también, como un oficio de saber contar y en este saber contar se da la creación de muchas metáforas y pienso que también tiene que ver con tener algo de poeta.
Sin embargo, en medio de violencias como las que se viven en México, cómo conservar esa “poesía” que Rodolfo Walsh plasma en Operación masacre, cómo jugar con los géneros para contar un hecho atroz.
“Creo que nada es excusa para escribir mal. Cuando se escribe mal, se escriben mal noticias, se escribe mal lo que sea, periodismo narrativo, etcétera”, sentenció Guerriero en una conversación que se puede rastrear en Noticias 22 Digital (http://noticias.canal22.org.mx/2018/11/28/periodismo-narrativo-leila-guerriero-fil-guadalajara/).
“Por supuesto que cuando escribís una noticia se escribe más urgido, estás apremiado por el tiempo. De todas maneras un periodista que se dedica a eso, y que escribe bien, está habituado a eso y conoce su caja de herramientas, su manera de escribir, su estilo, su voz propia. Yo confiaría en que sería capaz de aplicar una o alguna o todas esas cosas aun cuando esté urgido.
“Con el periodismo narrativo la gente cree que se trata de escribir raro, de poner metáforas o de ser poético. No se trata de eso. Se trata simplemente de encontrarle a cada texto la forma adecuada dentro de una voz propia y de un estilo propio. Hay periodistas que son más barrocos y otros que son más austeros, como Walsh, por ejemplo, que era un tipo que adjetivaba muy poco. Operación masacre, particularmente, tenía un estilo con muy poca floritura. Creo que cuando uno tiene una realidad conflictiva, una realidad violenta, una realidad hostil, tiene primero que nada que tener en claro que es periodismo y que el contenido importa por sobre todas las cosas. No se trata de escribir algo lindo y de salpicar un texto con metáforas. Primero, tener un buen reporteo y entender que el texto sobre todo es eso: el contenido.
“A la hora de escribir no puedes pensar en fórmulas, un texto tienen que tener tensión narrativa, momentos de suspenso y todo eso lo tiene que tener en la medida en que el texto lo pide y deja de pedirlo. Esa es la diferencia entre redactar, como dice Caparrós, y escribir. Es escribir bien o escribir mal. Me parece que plantando frente a una realidad que te golpea, que te resulta tremenda, hostil, que te lastima, a veces, vas a ser capaz de encontrar la mejor forma para que ese texto le interese a muchos lectores, que de eso se trata, digamos”, concluyó Leila Guerriero.