+ Cierran 4 puestos temporalmente para evitar accidentes, no cumplían con todas las medidas de seguridad; se hace un llamado a los padres de familia para que vigilen a sus hijos ante la compra y uso de “cohetitos”.
Con el objetivo de prevenir accidentes y crear conciencia en la población durante las fiestas decembrinas, Juan Francisco Quiles Robles, Director de Protección Civil Municipal y Bomberos de Manzanillo, informó que se lleva a cabo un intenso operativo preventivo y de seguridad en los 18 puntos de venta de pirotecnia autorizados por la SEDENA y el Ayuntamiento, ubicados en el municipio.
Explicó que ante lo peligrosos que estos artefactos pueden ser, no se dejará de lado ninguna medida de seguridad por lo que está siendo muy estricto en el cumplimiento de todas las acciones preventivas que marca el reglamento: “Para que una persona pueda vender pirotecnia tiene que cumplir con los siguientes requisitos de seguridad: primeramente contar con los permisos de SEDENA y Ayuntamiento, tener en el puesto 2 extinguidores de 4.5 Kg, tambos de agua y arena, un botiquín, iluminación de luz led (no con focos incandescentes ni ahorradores porque generan calor), enchufes de energía eléctrica retirados de los cohetes; el puesto deberá estar apartado 25 metros a la redonda de cualquier construcción, también deberá portar señalización de no fumar y de peligro”-.
Quiles Robles hizo hincapié en el uso precavido de los fuegos pirotécnicos y pidió a los vendedores no molestarse si Protección Civil les exige que cumplan con las medidas de seguridad, pues lo hace para salvaguardar la vida de la ciudadanía. Informó que en el primer día de operativo se pidió cerrar temporalmente cuatro puestos de venta porque no cumplen con todos los requisitos que se solicitan.
Es importante destacar que de acuerdo con la Fundación Mexicana para la Dermatología, el mal uso de la pirotecnia, sumado al hecho de no contar con las medidas de prevención necesarias, puede causar desde lesiones auditivas o irritación en los ojos, hasta quemaduras severas o incluso la pérdida de extremidades. El 60% de los accidentes relacionados con cohetes y pólvora ocurre en niños de entre 5 y 14 años de edad.