SELECCIÓN MEXICANA: ¡MÁS VALE QUE NO GANEN EL MUNDIAL!…

… ¡La ultraderecha arderá y dirá que es un título comprado por la 4T!

Una vez terminado el sorteo mundialista del pasado viernes, en el que se colocó a México en el Grupo A, acompañado de Corea del Sur, Sudáfrica y un europeo de segundo nivel por confirmar, la FIFA una vez más demostró que los anfitriones tienen pavimentado su paso por las primeras fases de los torneos mundialistas.

Aunque, debido a que la actual generación de futbolistas de la Selección Mexicana es una de las peores que se recuerde (tanto que en un país donde solían surgir grandes arqueros, ahora se piensa en llevar a uno de más de cuarenta años para que se retire en la justa mundialista), y que además el técnico nacional Javier Aguirre muestra su incapacidad táctica en cada duelo, los ultraderechistas golpistas pueden estar tranquilos de que no tendrán que pagar una campaña en redes para decir que la 4T compró la Copa del Mundo, como pasó con Fátima Bosch, la Miss Universo.

Es más probable que los ratones verdes, versión generación de cristal, vuelvan a fracasar estrepitosamente en la justa mundialista como hace 4 años, y que dejen a la fanaticada con las ganas de llegar a Cuartos de Final (que en esta ocasión será el sexto partido). Los pronósticos de los especialistas, como Ricardo “Tuca” Ferreti, son funestos, pues augura que México (con el nivel de juego actual) no ganará un solo duelo de la primera fase.

Por lo pronto, el sorteo mundialista sirvió para que la ultraderecha golpista enfureciera simplemente por la presencia de la presidenta Sheinbaum en el escenario futbolero, quien con orgulloso porte demostró que México está listo para recibir la máxima fiesta balompédica.

RIDÍCULO-MUNDIAL 2026

No pudo iniciar peor el sorteo mundialista. Si bien se recuerda que hace una década el FBI fue fundamental en las investigaciones del FIFA-Gate que destronaron a Blatter como presidente del ente futbolístico global, y posibilitaron la llegada de Infantino, los gringos se la cobraron con creces; que se entregara el “Premio FIFA de la Paz” a Donald Trump es uno de los episodios más vergonzosos y lastimosos de toda la historia de las copas mundiales, a la que las sospechas de la intromisión de Mussolini en 1934 y 1938, o de la Junta Militar argentina en 1978 parecen juego de niños.

Si hay algo que ha caracterizado al órgano mundial en su historia es la negación oficial de la mezcla asuntos políticos con los futboleros, siempre y cuando no se tratara de discriminar a países comunistas durante el siglo anterior, detonada por la premisa de que, desde la llegada de Havelange a la FIFA en 1974, se puso por delante al negocio con respecto al juego y a la afición.

De seguir así, algo podemos tener por seguro: sea quien sea que gane la final, el primer sujeto en levantar la Copa del Mundo será Donald Trump.

Comentarios

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *