Si el periodismo objetivo es atacar al Presidente, pondera John Ackerman, ¿el extremo opuesto es el periodismo comprometido con la transformación de México?
Al negar la idea de la objetividad periodística, el académico de la Universidad Nacional, articulista de Proceso y también conductor de Canal Once, recibió en el estudio de TV UNAM al periodista Vicente Serrano, invitado especial en Diálogos por la Democracia del domingo 26 de enero de 2020 (https://www.youtube.com/watch?v=UzYqumQjf-U).
Ackerman criticó a ese “grupo de colegas muy profesionales, no los chayoteros del sexenio anterior, que suponen que si no empiezan un comentario con un ataque al poder van a perder su autonomía e independencia”. Vicente Serrano, en cambio, “no tiene es prurito. Muchas veces se lanza desde el principio a favor de la Cuarta Transformación”.
¿Cómo negocias esa brecha?, le pregunta el anfitrión al creador del canal de YouTube, Sin Censura, quien el miércoles 22 de enero de 2020 renunció al aire a La Octava, donde condujo por poco más de dos meses el noticiero Éntrale sin Miedo.
“Se puede cuando tienes honestidad, cuando no tienes intereses ni necesidad de la publicidad oficial –respondió Serrano–. La gran ventaja de que me corrieran de Telemundo por una investigación política es que me obligaron a buscar la creatividad y, así, encontré este boom de las redes sociales. Descubrí que ya no necesitas del salario cuando tienes independencia, y que YouTube es un gran escaparate para lo que dices porque el contenido en internet se mueve a una velocidad impensable en radio y televisión”.
“Mis formas [de hacer periodismo] pueden no gustar, pero nadie puede cuestionar mi honorabilidad”, sostiene Vicente Serrano, quien atribuye esa cualidad a los valores familiares. Es nieto de un albañil y de una señora analfabeta, nacida en Estados Unidos pero expulsada de su país por su ascendencia mexicana. E hijo de un trabajador migrante y de una maestra. Serrano asegura que él sí sabe “lo que es perrearle”, “perseguir la chuleta”.
LA VERDAD VENDE, ES NEGOCIO
“¿Por qué los periodistas tenemos que pelearnos por saber quién tiene la razón o quién dice la verdad?”, se pregunta Vicente Serrano al reflexionar sobre su modelo de periodismo.
“La verdad es una concepción subjetiva, ¿por qué no empezamos por escuchar a la gente de a pie? Yo no me meto en el debate de quién es el verdadero periodista que merece estar en La Mañanera”, dice en referencia a la polémica que ha habido entre los reporteros de medios acreditados y los youtuberos o blogueros que se dan cita en Palacio Nacional.
Lo mejor sería que esos reporteros que cubren la conferencia de prensa del Presidente “se acerquen a la gente. Muchos opinan desde los estudios, con traje y aire acondicionado, acerca del Insabi, de los programas sociales, del avión presidencial. Pero nunca salen a la calle. Muchas de esas voces en los medios electrónicos, nunca han salido a la calle”.
En cambio, “hay una camada de estos nuevos comunicadores alternativos, emergentes”, en la que Serrano se inscribe aunque “yo no estoy tan nuevo”.
Sin embargo, “presumo una gran ventaja: no tengo amigos en la política y eso te hace libre. Si se tiene que reconocer o criticar que se haga una cosa o la otra, que sea con libertad y honestidad. Muchos periodistas se jactan de su amistad con políticos o grandes empresarios, cuando el periodismo no puede ser comparsa del poder”.
Reconoce que “me critican porque mis visiones le dan por su lado al poder actual, pero ni modo que defienda a Emilio Lozoya, como Ciro Gómez Leyva, o a Genaro García Luna, como Carlos Marín. O que como Jorge Ramos diga que las redes de corrupción entre el gobierno y el crimen organizado existieron hace mucho, cuando todavía se está llorando a las víctimas de esa farsa que fue la guerra contra las drogas”.
Cuando a Vicente Serrano le dicen “que estoy entregado al gobierno, primero que me lo demuestren porque la dignidad es lo más valioso. Muchos en esta prostitución de tantos años de la profesión periodística, han vendido hasta su dignidad. Olvidan que la verdad es muy buen negocio, que la verdad vende, pero en México era lo que menos importaba”.
EL SUEÑO MEXICANO
Después de residir casi tres décadas en Estados Unidos, Vicente Serrano decidió “entrarle al sueño mexicano” después de haber gozado el sueño americano. Pero “nadie es profeta en su tierra” y, a su regreso a nuestro país, recibió hasta una amenaza de muerte.
En Chicago transmitía su exitoso podcast Sin Censura cuando decidió volver a México, entusiasmado por el grado de politización que estaba alcanzando el pueblo mexicano en la esperanza de que el resultado de las elecciones de 2018 favoreciera a López Obrador.
Ya estando en la capital del país, fue invitado a integrarse a Radio Centro que luego se convirtió en La Octava. La experiencia terminó abruptamente cuando Serrano denunció que le habían querido imponer “líneas periodísticas” en la empresa que dirige Juan Aguirre Abdó.
En la emisión de Sin Censura del 24 de enero (https://www.youtube.com/watch?v=6p-iPPM7BBE), Vicente Serrano dijo que no hay nada personal en su renuncia, pero lo que dijo lo sostiene. Y aunque reprochó a su antiguo compañero de elenco, Ricardo Raphael, que lo haya descrito como egocéntrico, reconoció que Carmen Aristegui trató en su portal el tema de su salida de La Octava con seriedad y objetividad.
Finalmente, Serrano reveló que platicó con Aguirre Abdó y se comprometió con él a ser el primero en leer al aire el comunicado en donde la empresa exponga su verdad.
EN DEFENSA DE UN PROYECTO
En su videocharla astillada del sábado 25 de enero de 2020 (https://www.youtube.com/watch?v=dzlji4wrfJM), Julio Hernández López ‘Astillero’, director editorial de La Octava, reveló que no todo lo que pasa en esa emisora le gusta. “Hay personas intrigantes” que son los que mucho tuvieron que ver con la decisión de Vicente Serrano de irse de ese medio de comunicación.
Sin embargo, sus esfuerzos por construir un puente para que no escalara el conflicto que pudiera afectar el proyecto periodístico de La Octava, fueron infructuosos. Pese a todo, Julio Astillero remarcó que jamás le dio línea ni mucho menos hizo moción de censura a Serrano y a ninguno de los colaboradores de la barra informativa vespertina-nocturna.
Astillero reconoció que Juan Aguirre Abdó avaló un proyecto en el que entraran voces distintas a las que se han venido oyendo en los medios electrónicos, y lamentó que Serrano argumentara para su salida razones que no son válidas.
Denunció que quien iba a ser el director técnico del canal los abandonó de última hora, aventando al ruedo a todo el equipo, en un plan que parecía diseñado para exhibir el proyecto y forzar el retiro de los programas que Julio Astillero ha impulsado.
Y explicó que, si bien el contrato de cada conductor señala que la línea editorial de su programa está sujeta a la dirección general, la dirección editorial o la dirección del canal, no por eso se ejerció censura contra Vicente Serrano.
PALABRAS ALTISONANTES
En un comunicado publicado en su cuenta en Twitter, Juan Aguirre Abdó declaró que: “La Octava nunca ha pretendido limitar la libertad de expresión a los periodistas que conforman sus espacios informativos. Tengo la satisfacción de afirmar que los profesionales del equipo La Octava pueden confirmar mis palabras”.
Vicente Serrano anunció su renuncia el miércoles 22 de enero, resume Aristegui Noticias (https://aristeguinoticias.com/2601/lomasdestacado/vicente-serrano-no-fue-censurado-aguirre-abdo/), al señalar que se rehusaba a “recibir línea” y a que se le impusieran “temas” para analizar. “Quiero decirle que este es el último programa que conduce este servidor en La Octava. Por solidaridad y porque no vamos nunca a recibir línea de nadie, y porque siempre estamos comprometidos con la verdad, y porque nunca permitiré que se me impongan los temas que debo de abordar ni el tono con el que tenga que analizar las cosas”, manifestó el comunicador.
Aguirre Abdó apunto en el texto: “Hago público que se sugirió respetuosamente al conductor de ‘Éntrale sin miedo’, Vicente Serrano, que intentara acompasar el tono de su lenguaje respecto a ciertas expresiones que habrían podido provocar consecuencias legales para las estaciones de radio y televisión. A diferencia de las redes sociales, y otras plataformas que transmite por Internet, La Octava está sometida a la Ley Federal de Radio y Televisión la cual, en su artículo 5o., obliga a los concesionarios a elevar la propiedad del idioma”.
El director general de Grupo Radio Centro, apunta Aristegui Noticias, consideró que Serrano pudo malinterpretar “estas conversaciones apresurando conclusiones y su decisión”.
Finalmente, Aguirre Abdó indicó que a raíz de esta situación, se realiza un proceso de “negociación que podría lograr la terminación de un contrato mercantil en el cual las partes suscribieron obligaciones, documento independiente al contrato laboral existente”.
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