En estos días proliferan las denuncias en diversos municipios contra la entelequia que cual zombi aún se alcanza a ver, haciéndose llamar Confederación Nacional Campesina (CNC). Ocurrió que a esta agrupación le apoyó el gobierno del estado con la adquisición de quintales de alambre de púas que distribuyeron por los municipios para hacerlos llegar a “sus campesinos”, a precio “preferencial”. El problema fue que al más rancio y avinagrado estilo, condicionaron el acceso a dicho “apoyo” a que quien lo recibiera debía primero afiliarse o reafiliarse al dinosaurio pri.
No cabe duda que los priistas jamás entenderán que la única y lejana posibilidad de que sigan existiendo como partido, pasa necesariamente por el cambio de prácticas chantajistas y corporativas; aquí sí que se aplica aquel dicho de que “perro que traga huevos, ni aunque le quemen el hocico”. La aplicación de esta práctica en estos tiempos acredita que se trata de una estrategia de tontos, pues solo a un tonto se le puede ocurrir que esta es una forma de ayudar a su partido; solo un tonto puede creer que un ciudadano forzado a inscribirse, los apoyaría; yo calculo que es a la inversa, que crece su desprecio hacia aquel partido que los chantajea. Esta tontería más parece obedecer a la intención de hacerse trampa entre ellos, lo que queda del priismo; pues conviene recordar que actualmente están inmersos en la elección de su dirigencia nacional, a cuya competencia por cierto renunció el único candidato que la sociedad reconocía como decente, el ex rector Narro. Todo parece indicar que por lo menos el gobierno del estado ha tomado partido con alguno de los contendientes y por eso dio indicaciones a los dirigentes de la entelequia cenecista para que aplicaran la práctica de la afiliación forzada, misma que buscarían poner al servicio de quien han resuelto apoyar, que por cierto, dicho sea de paso, para el caso da lo mismo quien quede como dirigente, pues el único honor que tendría es ser el sepulturero de su partido en las elecciones de 2021.
No obstante debe advertirse que la realización de esta práctica violenta la legalidad electoral y es obligación de la autoridad iniciar las investigaciones respectivas y proceder penalmente, con todo rigor, en contra de los responsables de estas conductas delictivas. Veremos lo que hacen los partidos y el gobierno del estado en contra de los dirigentes del llamado sector campesino del pri; si los partidos políticos no se mueven seguramente que se hará nada, pues el gobernador proviene del partido violador, y es más, sus miembros lo reconocen como el primer priista del estado, ¿será el primer violador de la legalidad?
APARTE:
1.- Indignante, inaceptable, grotesco y criminal resulta el atentado contra de nuestra compañera y amiga Griselda Martínez, presidenta municipal de Manzanillo. Gracias a dios y a sus escoltas salió ilesa. Yo creo que a Gris la salvó el acierto de haber confiado su seguridad a la Marina, pues éste es el cuerpo de seguridad más confiable, si no es que el único. Colima sigue siendo la entidad más insegura y los responsables, que son las policías estatal y ministerial, las menos confiables, empezando por sus jefes, el secretario que se llama quien sabe cómo y el fiscal Verduzco. Esperemos que la guardia nacional haga la diferencia. A seguir adelante “Negra” y, felicidades junto con nuestro reconocimiento para la Marina. Pronta recuperación para los heridos.