Este sábado culminaron las actividades por el festejo del 50 aniversario de la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), la Universidad Jesuita de Guadalajara.
El jubileo arrancó en septiembre del año pasado cuando se cumplió medio siglo de la apertura en 1967 de una escuela a la que se inscribieron 31 alumnos. Durante el año de festividades hubo 23 actividades, desde charlas hasta exposiciones, enfocadas a distintos perfiles del egresado.
El programa de actividades coordinado por la exdirectora del plantel Cristina Romo, incluyó algunas relacionadas con las industrias culturales y los videojuegos, la comunicación política y la publicidad. Hubo también un taller de cuento científico, un encuentro de periodistas y una conferencia con el argentino Carlos Scolari, quien trabaja en Cataluña como especialista en medios digitales.
En este año jubilar se realizaron así mismo homenajes a maestros jesuitas, con la revelación de una placa en la que se mencionan al exrector Luis Morfin y a Raúl Mora, que fueron profesores de Comunicación.
Esta carrera ha albergado a más de tres mil egresados (3,022 para ser exactos), varios de los cuales trabajamos en el campo profesional de la Comunicación o vivimos dedicados a otras actividades en Colima (dos son sacerdotes). Pero por la carrera, incluidos docentes, han pasado más de cinco mil personas.
El sábado hubo misa, comida, una videoconferencia del español Manuel Martín Serrano (autor de La mediación social), audiovisuales de festejos anteriores y la presentación del libro conmemorativo 50 años en la formación universitaria de comunicadores: génesis, desarrollo y perspectivas, que fue coordinado por Graciela Bernal, excoordinadora de la carrera y actual docente.
Además, se colocó la primera piedra del edificio de Comunicación y Artes Visuales, donde quedó enterrada una cápsula del tiempo con la lista de todos los alumnos, egresados y profesores desde 1967 hasta 2018, teniendo como testigos de honor a los exdirectores y excoordinadores de la carrera.
Ya son cinco carreras
La coordinadora de la carrera, María Magdalena López de Anda, recordó la creación de la Escuela de Ciencias de la Comunicación que hoy es un Departamento e incluye cinco licenciaturas, maestría y doctorado en distintos ámbitos de la disciplina:
“Esta es una carrera que desde sus inicios se ha mantenido con un enfoque humanista. Básicamente la primicia es transformar la política a través de la comunicación, para llegar a la justicia”.
Magdalena resaltó que uno de los objetivos de esta celebración fue unir a egresados con los actuales alumnos, para generar un vínculo que los ayude en un futuro. No se festejan los programas de estudio sino las trayectorias profesionales de sus egresados, quienes están trabajando en todas las ramas de la comunicación: desde las oficinas de gobierno a las organizaciones de la sociedad civil, en los medios por supuesto y hasta en las artes. Fiel al espítitu jesuita, lo que reconoce el Iteso es un ejercicio profesional comprometido, dijo López de Anda.
En cuanto a la conferencia magistral, “Cuándo y cómo se hizo científica la Teoría de la Comunicación. Desarrollo y funciones previsibles en un mundo que se virtualiza”, se eligió al doctor Manuel Martín Serrano porque el académico español ha sido un referente para varias generaciones de comunicólogos.
El autor de La producción social de comunicación fue entrevistado por Raúl Fuentes, quien recientemente se acaba de jubilar, es egresado y ex director de la carrera.
El sábado se montó una exposición fotográfica y, finalmente, hubo un brindis amenizado por grupos musicales y solistas que han sido alumnos de la carrera.
Empezó con periodismo
La carrera en Ciencias de la Comunicación se abrió el 15 de marzo de 1967, en la entonces Casa de los Abanicos. Y de ella han egresado 65 generaciones, la primera en 1972. Actualmente el Departamento tiene más de mil estudiantes entre las cinco carreras y los posgrados.
El plan de estudios ha sufrido diversas modificaciones a lo largo del tiempo para ajustarse a las necesidades y demandas de las industrias. En ese sentido, se trabaja ya en el próximo cambio que entraría en vigor el próximo ciclo escolar.
Según informó la coordinadora de la licenciatura en el Iteso, la carrera de Ciencias de la Comunicación existe en México desde 1960.
Sus antecedentes inmediatos son las escuelas que formaban profesionales para el periodismo escrito de los años 50, como la “Carlos Septién García” (fundada en 1949), la de la Universidad Nacional Autónoma de México (en 1956) y la de la Universidad Veracruzana (1954).
En la década de los sesenta, la proliferación de medios de comunicación, sobre todo radio y televisión, impulsaron una transformación de las escuelas de periodismo para dar cabida a la formación de profesionales para esos medios electrónicos.
La carrera en el Iteso fue la segunda en su tipo en el país. El norteamericano Robert McHahon presentó al Consejo Académico de la universidad el proyecto. Y las clases que recibieron los alumnos de la primera generación fueron literatura, filosofía, historia, arte, cine, radio y televisión; algunas de éstas se impartían en inglés.
El Consejo Técnico creado años después reestructuró el plan de estudios buscando capacitar a los egresados para usar la fuerza de transformación social de los medios de comunicación, abundó López de Anda.
Cómo han pasado los años
Aunque extendido a lo largo de un año, el programa de festejos basado en la reflexión sobre la práctica profesional entre egresados y alumnos es similar a los ejercicios que se dieron, en una sola jornada, durante los festejos del 15 aniversario de la Escuela de Comunicación, cuando yo mismo era estudiante, o por los 20 años a los que asistí ya como egresado.
Al evocar esos festejos de hace tres décadas, no puedo sustraerme al recuerdo emocionado de los compañeros de mi generación que ya no están con nosotros. Compartimos sueños y en ocasiones logros. Más allá de los afectos, a la distancia descubro cuantos rasgos en común tenemos por habernos formado en esta profesión.
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